La hepatitis es una enfermedad que se presenta a través de la inflamación del hígado, un órgano esencial para desintoxicar nuestro cuerpo y sintetizar las proteínas. Esta enfermedad puede curarse de manera espontánea con cuidado médico o evolucionar hacia otras enfermedades como el cáncer de hígado, la cirrosis y la fibrosis. Las causas principales son los llamados virus de la hepatitis, ciertas enfermedades autoinmunes, algunas sustancias tóxicas y también otras infecciones.
Es necesario que nos hagamos las siguientes preguntas y conozcamos las respuestas por la relevancia que tiene esta enfermedad en la salud de los habitantes de Ecuador y de todos los países del mundo. ¿Cómo se previene la hepatitis? ¿Cuántas clases hay? ¿Cómo es la situación de esta enfermedad en Ecuador?
El día de la lucha contra la hepatitis
Cada 28 de julio se conmemora el Día Mundial contra la hepatitis. Esta fecha fue elegida porque un 28 de julio de 1925 nació Baruch Samuel Blumberg. El médico y bioquímico estadounidense que descubrió una proteína en la sangre que mostraba la presencia del virus de la hepatitis B. Es importante que la lucha contra la hepatitis tenga su propio día, ya que esto nos alienta a conocer más sobre esta enfermedad y a aprender a prevenirla.
La situación de la enfermedad en Ecuador
Ecuador no es un país endémico para la hepatitis, como sucede con Perú y Brasil. Sin embargo, a pesar de que la tasa a nivel nacional es menor al 8%, se cree que podrían haber personas que padecen de hepatitis, pero nunca han sido diagnosticadas por no haber buscado atención médica oportuna. En Ecuador existe un plan de vacunación ampliado por el Ministerio de Salud Pública en las que incluye de manera obligatoria la de la hepatitis B pediátrica que se aplica a los bebés recién nacidos.
Tipos de hepatitis
Existen cinco virus de la hepatitis, A, B, C, D y E. Las hepatitis B, C y D se contagian a través del contacto con fluidos corporales infectados.
La situación de contagio generalmente puede presentarse en una transfusión de sangre contaminada, durante un procedimiento médico en el que se utilice equipamiento infectado, en el momento del parto o al compartir agujas o equipos para inyectarse sustancias prohibidas.
También por contacto sexual (esto sucede en menor frecuencia en el caso de la hepatitis C).
Para la hepatitis A, el contagio habitualmente se produce de persona a persona a través de la vía fecal-oral. Esto porque el virus se encuentra en las heces de las personas que padecen la enfermedad. Por eso es tan importante el lavado correcto de las manos.
El virus de la hepatitis D se replica solo en presencia del virus de hepatitis B o como sobreinfección de esta última enfermedad. Es así como es muy importante la vacunación para prevenirla.
A pesar de que en el mundo algunos países no aportan datos sobre el VHD (virus de la hepatitis D), se sabe que hay entre 15 a 20 millones de infectados.
Cada año se declaran alrededor de 3 millones de casos sintomáticos de hepatitis E. Esta hepatitis es con frecuencia autolimitada. Pero también se dan casos en los que se presenta con su forma fulminante.
El virus se elimina en las heces, y el contagio se da especialmente por aguas contaminadas que se beben.
Hay una prevalencia fuerte en Asia, por lo que China desarrolló una vacuna contra esta enfermedad que no está disponible en otros países.
Conclusión
En el año 2016, la OMS lanzó un plan de prevención de las hepatitis y Ecuador se sumó a ese plan con el objetivo de cumplir con la vacunación como prevención y poner en práctica las medidas necesarias para la detección temprana para brindar el acceso a las terapias que necesitan los pacientes. Sin dudas, los ciudadanos de Ecuador deben estar conscientes de los riesgos existentes de contraer hepatitis. Por lo que las campañas informativas son tan importantes como cualquiera de los otros métodos de prevención y control de esta enfermedad.