En lo que se refiere a vacunación y con el objeto de orientar a las familias, el esquema de vacunación puede ser demorado por las circunstancias de fuerza mayor impuestas por la epidemia.
En la medida que ha evolucionado la epidemia de COVID-19: podemos en la actualidad reanudar las vacunaciones a nuestro niños y niñas, lactantes pequeños, pacientes con enfermedades crónicas e inmunodeprimidos, embarazadas etc.
Aunque elCOVID-19 esté alterando nuestras vidas diarias, la respuesta es sí. Procura seguir la rutina de vacunación de tu hijo o hija. Es importante que los niños y los bebés mantengan al día sus vacunas porque les protegen de las enfermedades graves. Eso significa que cuando tus hijos puedan volver a interactuar con otros niños, unos y otros estarán asimismo protegidos de otras enfermedades.
Este brote nos recuerda lo valiosas que son las vacunas. Nos demuestra que cuando se dispone de vacunas para una enfermedad, debemos mantener al día el esquema de vacunación de nuestros hijos y el nuestro propio. Sin la protección de las vacunas, las enfermedades se pueden propagar rápidamente y con terrible consecuencias. Por ejemplo, el sarampión y otras afecciones siguen siendo un riesgo constante. Somos afortunados de contar con la protección de vacunas contra estas enfermedades.
Las vacunas ayudan a educar a nuestro sistema inmunológico para que luche contra las infecciones. Para ello se introduce en el cuerpo la forma inactivada de un germen, sea una bacteria o un virus. Al estar inactivado, el germen no puede enfermarnos. Por el contrario, activa el sistema inmune de nuestro organismo y produce las defensas llamadas anticuerpos. En adelante, si en alguna ocasión vuelves a coger el virus, tu sistema inmunológico ya sabrá cómo combatirlo.
Dra. Gladys Zúñiga
Pediatra de Veris El Dorado